Todo tiene un principio

Da comienzo la bitácora de este navegante sin rumbo, aprovechando que tengo más tiempo libre del habitual y que empieza a asaltarme el deseo de escribir algo (ya veremos el que...)

Todavía estoy en fase de pruebas y quizás haya algún cambio (o quizás no... que tampoco tengo tanto, tanto tiempo libre y ya me conozco)

No prometo que haya la más mínima coherencia, periodicidad o calidad de ningún tipo que para eso ya hay mucha gente que promete en falso. Simplemente iré contando cosas por aquí sobre lo que me vaya pasando por la cabeza e intentaré hacerlo como buenamente sepa.
Si alguien quiere seguirme en este viaje será bienvenido.
Ah! y darle las gracias a mi camarada Quinn del blog Cisne Negro, ya que sin él esta empresa no se habría puesto nunca en marcha.

Emprendamos el viaje.