martes, abril 05, 2005

¿Lo hueles?

Volvamos con el libro “La comunicación no verbal”.
Ya os comenté las dudas que tenía sobre si algunas de sus teorías y estudios no habrían quedado ya obsoletos (os recuerdo que es del principio de los setenta) y al leer el capítulo dedicado al sentido del olfato crecieron estas sospechas.
En él nos habla de un relativamente reciente descubrimiento, una especie de sentido olfativo subconsciente. Existen “mensajeros químicos externos” que incluyen aminoácidos y hormonas esteroides, que son segregadas por el cuerpo, no tienen aroma y pueden transmitirse por el aire.
A estos mensajeros se les dio un nombre y en la actualidad son bastante conocidos: feromonas.
Un párrafo en especial me dejó bastante sorprendido y me preguntaba en que habría quedado todo (si se habría estudiado más o tendría alguna relación con el hombre). Aquí os lo pongo:

“... Son especialmente importantes en todo lo relacionado con el sexo, como lo demostraron experimentos relacionados con ratones. Si se confinan juntas treinta ratonas, el ciclo estrógeno de cada una, o ciclo en que entra en celo, se descompone. Si se agrega solamente un ratón macho, todos los ciclos estrógenos vuelven a la normalidad, excepto que ahora funcionan en sincronía. Si se expone a una hembra preñada tan sólo durante un cuarto de hora diario a la compañía de un macho que no sea el que la preñó, cesará su embarazo (¡¡¡¡!!!!). La preñez también puede ser detenida si se coloca a la hembra en una jaula vacía que ha sido ocupada anteriormente, lo que prueba que el olor que éste segrega es crucial (¡¡¡!!!). Otra prueba adicional consiste en destruir el lóbulo olfativo del cerebro de una hembra, lo que la inmuniza a este tipo de bloqueo del embarazo.

Escuchando: “Higher Power”, de Bernard Allison (porque en la actualidad siguen existiendo buenos blues man)

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